jueves, 18 de junio de 2009

Chau Fernando Peña, humorista puto, según propia definición


Esto me recuerda algo que contaba el gran maestro Juan Verdaguer:
Estan haciendo una colecta por la muerte de un humorista pobre, por supuesto. Encaran aun tipo -¿Podría poner $5 para enterrar a un humorista?
Y el punto: -Tomen $15. Entierren a tres.

5 comentarios:

  1. Y cuanta razón tenía Fernando. Porque aún aceptando que la nuestra es una lengua viva y que por lo tanto engendra nuevos vocablos, también es cierto que no deberíamos descuidar el hecho gramatical de llamar a cada cosa por su nombre respetando la importancia de la etimología de las palabras, de lo contrario se seguirán generando malos entendidos y buenas confusiones. Por ejemplo, para ser respetuosamente correctos, al puto siempre se lo debió haber llamado gay, en cambio al bombardero que tiró la primera bomba atómica, llamado Enola Gay, siempre se lo debió haber llamado Enola Puto.

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  2. Hablando del tema me acordé de un chistesito español
    Dos gays españoles se casan(ahora que la ley lo permite)
    -Pepe, quieres por esposo a Manolo?- dice el juez
    -Si quiero-
    -Manolo, quieres por esposo a Pepe?-
    -Si quiero-Dice Pepe
    -Os declaro marido y marido...Ala...a tomar por culo- remata el juez

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  3. Otro:
    Un gay se va a confesar ante el ovispo
    -Padre quiero confesar- dice el gay
    -Soy obispo debes llamarme monseñor- dice el ovispo
    -Monseñor quiero confesar que soy homosexual- dice el gay
    -Ah... en ese caso puedes llamarme Monse- dice el ovispo

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  4. y si de parejas hetero habláramos... el ovispo vendría a ser el cumpa de la señora avispa, no?

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  5. uno no puede estar de acuerdo con todo y menos sin probarla; pero que el tipo dejó estela, dejó.

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