Descomunal!...esta obra no la tenía!...que banda maravillosa!... ¡¿que habrán visto los atorrantes estos?!... Magnífico Manuel... como vas bajando línea con los textos... cuánto extrañaba eso!.
Ma' que anónimo, Virutex, cro que ahora va. Y claro que los gatos son lo más. Juná como te miran y como lo miran a Tatun, que él debe pintarlos, y al Tomi con El Roque en brazos, juná como lo miran
Te reenvío este porque en mi ignorancia lo había puesto en cualquier dibu menos en el de los gatos, por tanto no se si lo leiste Mariana Hernández dijo... Manu, en casa hubo muchos gatos, pero hubo uno, el Eusebio, que nos gano el alma a todos, sobre todo a la Lulu y Jerónimo que eran sus más fieles acariciadores. No obstante el amor incondicional a ambos vástagos, el tipito tenía un amor especial por mi. Cuando estaba dormida, de suibia a mi pecho, sigiloso, silencioso y una vez que se acomodaba, comenzaba unas especies de sopliodos, mezcla de aspiraciones,silenciosas, pero audibles. Cerca...muy cerca de mi cara, que no dejaban de ser inquietantes, al menos para mi, que era la destinataria de tan extraño proceder. El Titi decía que Don Eusebio me quería robar el alma, estoy segura de que si esa era su intención, no tenía ni la mas puta idea de lo que en realidad se afanaba. Con respecto a tu banda de gatos, una hermosura, sutiles, simples, sueltos, con un movimiento inquietante como los soplidos de nuestro Eusebio. Por cierto el final de Eusebio, fue muy triste , cuando ya estábamos en Barna y todavía estaba la puta custodia policial en nuestra morada, estando la Lulu y Jero en casa, la cana, de pura maldad se lo afano y nunca lo volvieron a ver. Me gustaría pensar que es uno de los gatos de tu banda y que anda entreverado entre ellos, buscando una gata en celo por la plaza Pringles o la Primero de mayo. Un abrazo y Agur amigo.
¡Bueno me emociona lo que generó el gaterío! ¡Si hasta Mariama, actual dama mayor de Barcelona, se metió al ruedo,y con la historia de un gato bastante ligero para los mandados, como se ve. Pronto les voy adar una sorpresa con la versión original de ese dibujo y van a ver como por tratarse de gatos,trae cola. Besos
perfil + o -, algo jovato, pero pintoresco, docente universitario, me permito dibujar, pintar y escribir. Canto tangos secretamente. Tengo amigos de putísima madre. Publiqué, en los últimos 35 años, en casi todas las revistas de humor de argentina.(en Satiricón no. Nunca me dieron bola).
Publiqué en alguna que otra extranjera y laburé en publicidad durante ese tiempo. Y me cansé, che.
Descomunal!...esta obra no la tenía!...que banda maravillosa!... ¡¿que habrán visto los atorrantes estos?!... Magnífico Manuel... como vas bajando línea con los textos... cuánto extrañaba eso!.
ResponderEliminarMaster Ud. siempre atento. ¿no duermes?
ResponderEliminarManuel(me meto como anónimo, ¿si no?
los gatos tienen ese qué sé yo, viste?
ResponderEliminarel magnetismo de su caminadita descalza, la cadencia, la no estridencia, la tan comentada independencia, y todos los 'encias' que se te ocurran.
como verás, de los micifuces está bueno aquello que puedo robarle para mi propia personalidad.
mish mish ¿purrrrrrr?
felíz día, Manolillo!
pd: no, no te metas como anónimo. dar la jeta always, toujour, siempre. (mestrañaraña!)
ESTO MERECE UN CUADRO
ResponderEliminarMa' que anónimo, Virutex, cro que ahora va. Y claro que los gatos son lo más. Juná como te miran y como lo miran a Tatun, que él debe pintarlos, y al Tomi con El Roque en brazos, juná como lo miran
ResponderEliminarEsta obra tiene algo de pintura japonesa
ResponderEliminarDe arte chino milenario
Zen Rosarino puro
Te reenvío este porque en mi ignorancia lo había puesto en cualquier dibu menos en el de los gatos, por tanto no se si lo leiste
ResponderEliminarMariana Hernández dijo...
Manu, en casa hubo muchos gatos, pero hubo uno, el Eusebio, que nos gano el alma a todos, sobre todo a la Lulu y Jerónimo que eran sus más fieles acariciadores. No obstante el amor incondicional a ambos vástagos, el tipito tenía un amor especial por mi. Cuando estaba dormida, de suibia a mi pecho, sigiloso, silencioso y una vez que se acomodaba, comenzaba unas especies de sopliodos, mezcla de aspiraciones,silenciosas, pero audibles. Cerca...muy cerca de mi cara, que no dejaban de ser inquietantes, al menos para mi, que era la destinataria de tan extraño proceder. El Titi decía que Don Eusebio me quería robar el alma, estoy segura de que si esa era su intención, no tenía ni la mas puta idea de lo que en realidad se afanaba.
Con respecto a tu banda de gatos, una hermosura, sutiles, simples, sueltos, con un movimiento inquietante como los soplidos de nuestro Eusebio.
Por cierto el final de Eusebio, fue muy triste , cuando ya estábamos en Barna y todavía estaba la puta custodia policial en nuestra morada, estando la Lulu y Jero en casa, la cana, de pura maldad se lo afano y nunca lo volvieron a ver. Me gustaría pensar que es uno de los gatos de tu banda y que anda entreverado entre ellos, buscando una gata en celo por la plaza Pringles o la Primero de mayo.
Un abrazo y Agur amigo.
¡Bueno me emociona lo que generó el gaterío! ¡Si hasta Mariama, actual dama mayor de Barcelona, se metió al ruedo,y con la historia de un gato bastante ligero para los mandados, como se ve.
ResponderEliminarPronto les voy adar una sorpresa con la versión original de ese dibujo y van a ver como por tratarse de gatos,trae cola. Besos
Mariana, intenté tipiar. Mariana,Mariana
ResponderEliminar